El talento humano es una de las claves para la transformación digital en las organizaciones, pues a las las compañías ya no es suficiente ser eficiente, deben cuestionarse si los servicios y productos de la compañía seguirán teniendo valor en 2 ó 5 años.

Y esta transformación digital no es una puramente tecnológica, es una transformación cultural de las organizaciones, donde las personas, y en concreto, máximos ejecutivos de las organizaciones son una pieza clave.

El rol de los directivos de una compañía debe transformarse para conseguir dotar a la organización de los mecanismos necesarios que permitan conseguir flexibilidad, velocidad y ejecución de calidad necesarios para la era digital.

Lo anterior es una de las conclusiones que ofrece el estudio, “Rol de los C-level en la transformación digital”, elaborado por asociaciones españolas y la consultora Everis. Este informe analiza el papel de los principales perfiles directivos en torno a este proceso.

Contar con un ecosistema de alianzas estratégicas que permitan diferenciarse en un mercado cada vez más competitivo e interconectado es fundamental para la transformación digital es fundamental.

En inducir y fomentar el talento de los millenials en el seno de sus organizaciones es uno de los principales retos de los directivos para los próximos años. Además de contar con un ecosistema de alianzas estratégicas que permitan diferenciarse en un mercado cada vez más competitivo e interconectado además de ser fundamental para la transformación digital.

El análisis destaca que, el Directivo Digital se encuentra en una posición de C-level (ya sea el CEO, el CFO, el CDO) los cuales deben convertirse en líderes digitales y han de fomentar el talento digital y el desarrollo de las competencias digitales de la plantilla como palancas clave para el éxito de la transformación. Asimismo, deben facilitar al máximo la colaboración entre áreas de su organización para asegurar la máxima eficiencia en los procesos y evitar el aislamiento entre departamentos, que dificultan el acceso a la información. Además, deben fomentar relaciones dentro y fuera de la organización, estableciendo un ecosistema de partners efectivo.

Los jóvenes de la generación millennial serán clave para que las organizaciones puedan llevar a cabo su transformación digital. Sin embargo, la tasa de fidelidad de esta generación hacia su compañía es considerablemente baja (en torno al 30%), un dato que las organizaciones han de tener en cuenta para asegurar su futuro. En este sentido, el estudio destaca la necesidad de adaptarse a las cuatro claves identificadas por el divulgador y fundador de nexxworks, Peter Hinssen, para alcanzar la transformación digital: muy baja tolerancia al fallo percibido por parte de los clientes, flexibilidad y agilidad, impacto tecnológico en la transparencia y la responsabilidad; y, por último, la pérdida de control por parte del equipo directivo.

La baja tolerancia al fallo percibido por parte de los clientes condicionará fuertemente la interacción de las empresas con éstos. La adaptación tecnológica, por tanto, resulta clave para proteger la rentabilidad de las empresas. Según el informe, para alcanzar la excelencia digital pasa por tres niveles: orientación al cliente, organización interna y la innovación en torno a modelos de negocio.